¿Qué celebramos el Domingo de Ramos?
Echando sus mantos sobre el burro, hicieron montar a Jesús. Mientras él avanzaba, extendían sus mantos por el camino. Cerca ya de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, llenos de alegría, se pusieron a alabar a Dios a grandes voces, por todos los milagros que habían visto. Decían: «Bendito el Rey que viene en nombre del Señor! Paz en el cielo y gloria en las alturas.» (Lucas 20., 35-38.)
Es recuerdo triunfal de Nuestro Señor Jesucristo en Jerusalén antes de la Pascua, Jesús es reconocido como El Cristo de Dios, el Ungido, el Mesías el cual liberará a los hombres de la esclavitud del pecado.
Hoy en día, en el domingo de ramos hacemos una procesión de ramos para recordar la entrada triunfante de Cristo a Jerusalén. El domingo de Ramos nos recuerda que nuestra vida cristiana es un paso de las tinieblas a la luz, de la humillación a la gloria, de la esclavitud del pecado a la liberación por la Gracia.
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